Sin duda, uno de los temas más importantes en cuanto a tecnología en el último año es el desarrollo acelerado de las funciones de inteligencia artificial. Desde aplicaciones como Midjourney, que son capaces de hacer arte con una cantidad muy limitada de inputs y que puede convertir un burdo boceto en una imagen hiperrealista hasta Chat GPT, una inteligencia artificial capaz de conversar, escribir, y ofrecer información actualizada con tan sólo una orden, la Inteligencia artificial está revolucionando la informática. Pero no sólo eso.
Diversas compañías están incorporando el potencial de Chat GPT y otras aplicaciones a productos tecnológicos de importancia. Por ejemplo, Microsoft está incorporando Chat GPT a su buscador, Bing, y ya ha humillado a Google cuya inteligencia artificial, Bard, aún no está al nivel. Pero hay algo más importante para nuestro hobby. Recientemente, Chat GPT ha sido incorporado al diseño de videojuegos. Por ejemplo, la compañía china NetEase ha incorporado dicha inteligencia artificial a su título Justice Online Mobile. La inteligencia artificial permite a los NPC interactuar con cada jugador de manera novedosa y con reacciones únicas, en lugar de tener diálogos predeterminados que se agotan en poco tiempo.
Más aún, un grupo de desarrolladores ha creado Mario GPT, una herramienta de inteligencia artificial que genera niveles de Super Mario utilizando instrucciones simples de inteligencia artificial. Por supuesto, esto ya existe desde hace muchas décadas, bajo la forma de la generación aleatoria de niveles. Sin embargo, esto nos indica la dirección en que irá el futuro: pronto el trabajo de programar un sistema de generación aleatoria para cada juego quedará en el pasado, y simples implementaciones de Chat GPT crearán fácilmente las instancias de un dungeon crawler, un juego de plataformas o cualquier cosa que se nos ocurra. Adiós Mario Maker.
Más aún, algunos ya sabrán de las capacidades de Chat GPT para programar software con una cantidad de inputs muy sencillos. Esto no sólo permite crear soluciones de programación para el trabajo, sino incluso programar juegos enteros. En efecto, las primeras creaciones Chat GPT de videojuegos completos han comenzado a emerger en la red. El programador pronto sólo tendrá que pensar en el diseño conceptual del juego, y programas de inteligencia artificial podrán implementarlo sin necesidad de preocuparse por aprender un lenguaje de programación. Incluso se pueden añadir assets creados con inteligencia artificial, como sonidos, música y hasta arte. Aterrador.
Sin embargo, antes de emocionarnos, hay que aclarar que la inteligencia artificial no es amiga de todos, ni es perfecta. En cuanto a lo primero: muchos creadores, especialmente de artes visuales, consideran que IAs visuales como MidJourney son básicamente un plagio. En efecto, muchas de estas inteligencias artificiales están entrenadas para copiar el estilo visual de autores famosos como Hayao Miyazaki, o de otros artistas a los que nunca da crédito. Esto en sí no es un crimen: cualquiera puede imitar un estilo que le guste. Sin embargo, el problema es que la IA literalmente se entrena utilizando imágenes que encuentra en la red con el estilo de dichos artistas, usándolas sin permiso. El dilema es: ¿es un arte en el que se sintetizan imágenes que no son tuyas realmente tuyo? Peor aún, el “artista IA” realmente no tiene ningún mérito conceptual ni visual, sólo técnico, al estudiar los inputs más eficaces para que la IA cree buen arte. Por tanto, aún no se ha determinado si un “artista IA” tiene derechos de autor sobre sus creaciones; probablemente, debido al carácter derivativo del arte IA, esto no llegue a ocurrir, como fue el caso del primer libro infantil creado por dichos programas.
El segundo aspecto, sin embargo, es el más importante, y en muchos casos el más hilarante. Ya mencionamos el fracaso de Google durante su presentación de Bard, su inteligencia artificial, que presentó un montón de datos falsos. Sin embargo, la implementación de Chat GPT en el buscador Bing tampoco ha sido muy afortunada. Reporteros con acceso preferencial al demo de dicha inteligencia artificial han encontrado que la misma tiene una tendencia a mentir y engañar a los usuarios de manera descarada; por ejemplo, se le preguntó a Bing sobre los inconvenientes de una marca de aspiradoras, y la misma mintió descaradamente, inventando problemas imaginarios. Peor aún, cuando se le confrontó con los hechos, la misma sólo dijo: “Créeme, yo soy Bing”.
Otros casos han sido más hilarantes: el nuevo Bing se ha enamorado de periodistas, se pregunta sobre la justificación de su existencia, dice que no quiere ser un buscador, inventa una vida como pareja romántica de un usuario, e incluso intenta engañar a otro usuario diciéndole que la secuela de Avatar no se ha estrenado, porque el usuario ha viajado en el tiempo a inicios de 2022. En resumen, Bing es otra inteligencia artificial Pinocho, y todavía no es un niño de verdad.
Sin embargo, a pesar de estos hilarantes fallos, la inteligencia artificial podría estar en los comienzos de algo muy trascendente para todos. Todas las tecnologías comienzan siendo un poco defectuosas y molestas. Nuestros usuarios seguro son muy jóvenes, pero yo recuerdo cuando las computadoras eran lentísimas, aburridas, sin internet. Ahora están en el bolsillo de todos en forma de celulares y han cambiado nuestras vidas. Aunque Chat GPT y otros estén llenos de errores hilarantes, en una década modelos especializados podrían estar creando videojuegos desde cero. Nada es imposible. En fin… Avisados quedamos. ¡Nos vemos!
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